La petrolera Shell ha ganado un 136% más de beneficios netos en el año 2016 en comparación con el año precedente, hasta los 4.575 millones de dólares (4.239 millones de euros). En realidad, el motivo de las cifras positivas ha sido, en parte, gracias a la reducción de costes y desinversiones.
La empresa ha señalado que el beneficio bruto ha sido de 5.606 millones de dólares (5.194 millones de euros) durante 2016 frente a 2015, lo que supone un 173% más, según explica la compañía en un comunicado a la Bolsa de Londres (Reino Unido).
Además, Shell ha asegurado que espera pagar un dividendo de 0,47 dólares (0,43 euros) por acción ordinaria con cargo en el último trimestre de 2016 y ofrecer la misma cifra durante los tres primeros meses de 2017.
Por otro lado, Royal Dutch Shell está evaluando la posible venta de algunos de sus activos de refinación, transporte y distribución en Argentina. La decisión forma parte del programa de desinversiones puesto en marcha por la petrolera.
