La compañía petrolera Repsol ha invertido 30 millones de euros en el mantenimiento de la central que la compañía tiene ubicada en la ciudad catalana de Tarragona (España). De hecho, ha hecho una parada programada en el área de combustibles del complejo para ejecutar varias tareas de mantenimiento.
El objetivo de la empresa es, además de realizar trabajos de mantenimiento e inspección, hacer algunas innovaciones tecnológicas que mejorarán sin duda el trabajo diario de la empresa y garantizar un nuevo ciclo de operatividad de las plantas, entre otras cosas.
La inspección consta de la revisión de 480 equipos, 170 líneas y 270 válvulas de seguridad, así como la sustitución de la columna 655-C-14, de 40 metros de alto, cinco metros de diámetro y 180 toneladas de peso. En realidad, la compañía realiza este tipo de paradas de mantenimiento de manera periódica.
Por su parte, el presidente de Repsol, Antonio Brufau ha asegurado que Argentina y Brasil “están ansiosos” de recibir el gas de Bolivia, porque es “absolutamente competitivo”. El presidente de la corporación energética y petroquímica se ha reunido con el presidente de Bolivia, Evo Morales, en Santa Cruz, la mayor ciudad y capital económica del país.
