Venezuela ha recibido los primeros 400 taxis fabricados en China del lote de 20.000 vehículos Chery, tal y como ha publicado la agencia de noticias china ‘Xinhua‘. El pedido forma parte del marco del acuerdo entre Venezuela y China.
Cada taxi, alimentado por una combinación de gas y gasolina, está equipado con una cámara de seguridad y una radio para comunicarse. Haiman El Troudi, el ministro de Transportes de Venezuela, ha afirmado que “en 2015, se traerán 10.000 taxis y el resto, en 2016”.
El plan de financiación entre ambos países se lanzó en 2014 por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, para impulsar la modernización del sector de transporte público. El país latinoamericano también ha importado los autobuses Yutong, fabricados en China, y está construyendo una planta de fabricación de motores con ayuda de la nación asiática.
La fábrica de autobuses producirá 3.500 unidades anuales. Se prevé que cubra las necesidades domésticas del país y que sea capaz de exportar a otras regiones latinoamericanas en el futuro.
Venezuela no es el único país que ha comprado vehículos de transporte a China. De hecho, China y Argentina firmaron un acuerdo para el sector ferroviario en 2014. Sin embargo, los analistas creen que la compra de trenes chinos por parte de Argentina perjudica la economía nacional.
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