El Sistema Meteorológico Nacional de México ha anunciado que debido a la incidencia del fenómeno climatológico conocido como El Niño, este verano se vivirá un mayor número de ciclones y tormentas en las regiones del noreste, el centro y el sur del país, lo que puede afectar a la productividad industrial y a la logística.
El fenómeno de El Niño está relacionado con el calentamiento en el Pacífico oriental y suele ir asociado de fuertes tormentas y huracanes. El último fenómeno de este tipo vivido en México se produjo en 2009 y 2010, con importantes daños a empresas de Nuevo León, Veracruz, Tabasco y Coahuila.
Para este verano el Sistema Meteorológico mexicano ha advertido de la posible formación de hasta 19 ciclones tropicales, siete de los cuales podrían llegar a convertirse en huracanes de categoría 1 y 2 y cuatro de ellos alcanzar categorías de entre 3, 4 y 5.
Los expertos han advertido que la incidencia de este fenómeno climatológico va a afectar de manera directa al sector industrial y al sector logístico, haciendo más difícil la cadena de suministro. Por lo que algunas empresas están llevando labores de aprovisionamiento para evitar el desabastecimiento.
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