Bolivia está negociando una mejora de las condiciones económicas y de trabajo de los transportistas. Representantes del gobierno y del sector del transporte pesado han formado cuatro meses sectoriales para tratar los asuntos más importantes.
Las relaciones entre el gobierno boliviano y el gremio de los transportistas han estado sometidas a tensión en los últimos meses. Los camioneros llegaron a bloquear las principales carreteras del país a finales de enero para pedir mejoras en sus condiciones laborales, especialmente en materia impositiva.
El gobierno se comprometió a negociar con los transportistas una vez pasada la fecha del 21 de febrero, en la que se llevó a cabo el refrendo del mandato de Evo Morales.
La formación de las mesas de trabajo ha sido el primer paso dado en la negociación. Temas como la nueva normativa de impuestos nacionales, la reposición del combustible y los camiones incorporados serán tratados en los próximos días a fin de encontrar un acuerdo que sea beneficioso para todas las partes implicadas.
El transporte de mercancías por carretera tiene un gran protagonismo en la economía boliviana. De hecho, el país está desarrollando su primera carretera de diez carriles para agilizar el tráfico rodado.
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