La Unión Europea ha impuesto ahorrar energía a las grandes empresas, que deberán someterse a una auditoría energética antes del 14 de noviembre para cumplir con el real decreto 56/2016 del 12 de febrero de 2016.
Las auditorías energéticas deberán cubrir el 85% del consumo total de todas las grandes empresas o de aquellos grupos de sociedades que sean de gran tamaño. Las compañías que no las lleven a cabo cometerán una infracción muy grave, que acarrearía una multa de hasta 60.000 euros, según la Ley 18/2014.
El objetivo de la nueva normativa es permitir a las organizaciones conocer cómo usan la energía. El socio especialista en derecho administrativo y regulatorio, Luis Pérez de Ayala, no cree que el objetivo a corto plazo sea precisamente el ahorro, aunque no duda que será de gran ayuda para las grandes firmas.
Por otro lado, la Unión Europea ha alcanzado un acuerdo provisional para la liberalización de los mercados nacionales de transporte ferroviario de viajeros en los estados miembros y la independencia de los gestores de infraestructuras.
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