La Comisión Europea (CE) ha solicitado a Holanda, Bélgica y Francia la eliminación de ventajas fiscales que se aplican en sus puertos, al ser contrarias a las reglas comunitarias de competencia.
En concreto, Holanda realiza exenciones que benefician a las compañías públicas, incluidos los operadores portuarios, considerando que podrían darles una ventaja injustificada y, aunque modificó su legislación en junio de 2015, ha excluido los puertos de Ámsterdam, Den Helder, Groningen, Moerdijk, Róterdam y Zeeland.
Por otro lado, los embarcaderos de Francia y Bélgica están recibiendo ventajas selectivas que contravienen las normas comunitarias, pagando un impuesto de sociedades más bajo de lo normal.
En consecuencia, la CE ha propuesto medidas para adaptar sus legislaciones. Los tres países tendrán dos meses para introducir los cambios necesarios.
Asimismo, la Comisión Europea ha exigido a Bélgica recuperar 700 millones de euros por los impuestos impagados de un total de 35 multinacionales al conceder ventajas fiscales a través de su sistema de exoneración de beneficios.
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