Desde el lunes 28 de abril, cuatro de las empresas líderes que realizan labores de acarreo en el Puerto de Los Ángeles y Long Beach se encuentran de huelga para exigir mejoras salariales.
La huelga de 48 horas ha sido convocada por el sindicato Teamster Union y ha sido respaldada por la organización Justice for Port Truck Drivers. Esta acción reivindicativa está destinada a dar conocimiento social de la realidad a la que están sometidos los conductores de camiones que realizan su labor en los puertos de Los Ángeles y Long Beach. Según han manifestado los sindicatos, los conductores han sufrido “años de robo de salarios y de trato injusto”.
Según los representantes de los camioneros portuarios, los transportistas mueven cada día cerca de 4 mil millones de dólares (algo más de 2,8 millones de euros) para empresas como Walmart o Home Depot, pero con frecuencia reciben ingresos por debajo del salario mínimo.
Con esta huelga, los transportistas quieren conseguir mejoras salariales, que cese la violación de sus derechos como trabajadores y que se acabe con la clasificación errónea que reciben como contratistas independientes, cuando en realidad no lo son.
El paro se produce en un momento en que varias organizaciones sindicales han obtenido ya victorias en sus reivindicaciones contra los puertos. Recientemente, siete camioneros portuarios contratados por Pacer Cartage como contratistas independientes consiguieron que esta clasificación fuera considerada ilegal y se les reconociera como trabajadores.
Otros países del continente americano también han tenido que hacer frente a huelgas de los trabajadores del puerto. Es el caso de Chile, que durante el pasado mes de enero vivió una oleada de huelgas en sus puertos.
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