Los expertos defienden la necesidad de mantener los aranceles impuestos en México a la importación de acero procedente de China. La medida se adoptó el año pasado a fin de proteger el mercado interno frente a las importaciones subvaluadas.
El acero chino es uno de los más baratos a nivel mundial y uno de los que más importan los países latinoamericanos. La crisis surgida el año pasado a raíz de las protestas de los trabajadores del sector del acero mexicano, dieron lugar a que las autoridades públicas adoptaran medidas para incentivar el consumo de acero de producción nacional frente al acero llegado desde china.
Las medidas adoptadas para proteger el acero nacional incluían el establecimiento de un arancel de un 15% a las importaciones de acero chino, pero esta medida se va a retirar a lo largo del mes de abril.
Los expertos del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC) no están conformes con la retirada del arancel y creen que incluso sería conveniente elevarlo al 30% para todos aquellos países con los que México no tiene firmado un tratado de libre comercio.
Las importaciones de acero chino han generado problemas en otros países latinoamericanos. De hecho, Colombia y Chile han adoptado medidas para regular las importaciones de acero chino.
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