Los minoristas que participaron en el último estudio de RSR citan tres barreras tecnológicas para todos los proyectos del Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés), a pesar de ser son optimistas acerca de su valor.
Estas barreras consisten en combinar fuentes de información diversas, decidir la respuesta más adecuada ante sucesos o expectativas de información concretas y manejar grandes volúmenes de información provenientes de tantas fuentes distintas en tiempo real.
Para superar estos obstáculos, Digital Business Platform de Software AG integra una serie de tecnologías clave que son críticas para hacer posible Smart Store Monitoring.
Algunas de las soluciones son la conectividad a todas las fuentes de información habilitadas para IoT, incluyendo los sensores y las fuentes de noticias en el interior de la tienda, los modelos predictivos, la gestión del inventario, los puntos de servicio, etc.
También se busca proporcionar conocimiento práctico en tiempo real acerca de lo que ocurre en la tienda, visible tanto para el personal, como para los vendedores en la central.
La capacidad para ajustar automáticamente la actividad promocional dentro de la tienda basándose en la respuesta del consumidor en tiempo real y poder incorporar los modelos predictivos para poner en marcha acciones como utilizar personal adicional o reponer estanterías justo en el momento oportuno se suman a las soluciones.
Además, las herramientas de gestión de la información in-memory y de analítica en tiempo real se aseguran de que la información sea accesible y práctica.
Por su parte, las herramientas de conectividad y para la gestión de procesos garantizan que aquellos que se llevan a cabo en la tienda se pueden gestionar y automatizar donde sea conveniente, para agilizar los procesos omnicanal.
De acuerdo con las conclusiones del estudio de RSR, para los negocios de retail la precisión del inventario (un 49%) y la visibilidad de éste a lo largo del sistema (un 40%) son dos de las tres ventajas más importantes de IoT.
Los comerciantes minoristas deben asegurarse de ofrecer opciones de procesamientos de pago que hayan sido probadas durante un tiempo y que ofrezcan a los clientes tranquilidad cuando tengan que comprar al saber que estarán protegidos mediante el mejor control de transacciones y de prevención de fraude.
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