La nueva normativa sobre pesaje de los contenedores de carga marítima adoptada por la Organización Marítima Internacional (OMI) entrará en vigor el próximo 1 de julio y los países ya están trabajando para adaptarse a las nuevas normas.
Los últimos estudios llevados a cabo en el sector del transporte marítimo de carga han puesto de manifiesto que gran parte de los accidentes acaecidos en buques portacontenedores están relacionados con un exceso de carga, por lo que la OMI ha decidido poner freno al problema estableciendo mayores controles.
Los cargadores serán los encargados de verificar que el peso del contenedor es el que efectivamente consta en la documentación que acompaña al mismo. La verificación de la masa bruta será imprescindible para que los contenedores puedan ser cargados en los buques.
La normativa de la OMI no establece nada sobre la forma de pesar los contenedores, pero existe el consenso de llevar a cabo el peso con el contenedor cargado y cerrado, aunque también podrá pesarse la carga por separado y sumar luego la tara del contenedor.
Los puertos ya están trabajando para adaptarse a la nueva normativa y se están incorporando nuevas tecnologías para poder llevar a cabo el peso de los contenedores o la mercancía con la menor pérdida de tiempo posible. De hecho, algunos puertos se han adelantado a la entrada en vigor de la norma y ya lo tienen todo listo para el pesaje de contenedores.
Los expertos creen que la OMI no ha dado demasiado tiempo a los puertos y cargadores para adaptarse a las nuevas normas y que sólo un 30% de los cargadores a nivel mundial estarán preparados para cumplir con la nueva norma a partir del próximo 1 de julio.
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