La navegación lenta de portacontenedores, práctica en la que los buques navegan a una velocidad inferior de aquella para la que fueron construidos, ya no es útil a nivel económico a causa de la bajada de los precios del combustible.
De hecho, el coste del combustible ascendía a 600 dólares/tn (538 euros por tonel) en el año 2007, mientras que actualmente el coste oscila entre los 100 y 150 dólares/tn (89 y 134 euros por tonel), lo que reduce los gastos y las navieras que realizan dicha práctica.
De esta manera, con el precio actual del combustible sería más rentable para los portacontenedores navegar a una velocidad mayor, ya que el aumento del consumo se traduciría a un menor número de buques necesarios para cumplir con los servicios del sector, según informa la consultora Drewry.
No obstante, la flota mundial de portacontenedores ha aumentado en 2015 por cuarto año consecutivo, llegando a los 5.200 buques con capacidad para transportar 19,94 millones de TEUs, según informa Alphaliner.
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