El crucero Crown Princess de la compañía Princess Cruises llegó a San Diego la pasada semana con más de 100 personas entre pasajeros y tripulación con molestias gastrointestinales a causa de un norovirus.
El crucero debería haber seguido su viaje rumbo a Los Ángeles siguiendo su itinerario normal por la costa de California y el norte de México, sin embargo la detección del norovirus a bordo del buque obligó a la compañía a suspender el viaje.
En los últimos meses son ya una docena de líneas de cruceros las que han reportado la presencia a bordo de personas enfermas a causa del norovirus, especialmente las que navegan desde los puertos de Estados Unidos. Compañías como Cunard Line y Celebrity han sufrido las consecuencias del norovirus, que también ha afectado a un crucero de National Geographic.
Holland America Line vio afectado uno de sus cruceros el pasado mes de febrero, pero la infección más grave hasta el momento se produjo en el crucero Explorer of the Seas de Royal Caribbean, donde enfermaron 600 personas.
Expertos del Mercy Medical Center (Baltimore) han destacado que estos brotes se producen por la acumulación de personas en espacios de reducido tamaño y por no seguir unas correctas pautas de lavado de manos. Estos factores, unidos a la exposición de la comida en las zonas de buffet, hacen que los virus se extiendan rápidamente.
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