El buque MV Pegasus Highway ha sido detenido por la Guardia Costera de Estados Unidos tras haberse revelado en una inspección una serie de deficiencias, entre ellas, defectos en el sistema de seguridad contra incendios.
El equipo de inspección subió a bordo del buque para realizar una inspección de rutina. La Guardia Costera descubrió que el buque infringía diversos preceptos del Convenio sobre Seguridad de la Vida Humana en el Mar. La deficiencia más grave detectada afectaba al sistema de detección de incendios, que estaba inoperable.
“A través del Programa de Control del Estado del puerto, la Guardia Costera verifica que los buques extranjeros que llaman en los puertos de Estados Unidos reúnen los requisitos legales exigidos en nuestro país y las disposiciones internacionales para proteger a las personas, la propiedad y el medio ambiente”, ha destacado el comandante Matt Edwards.
Edwards ha añaidod que “vamos a seguir trabajando con la tripulación del buque para garantizar que las deficiencias sean corregidas y que el recipiente es seguro para reanudar su actividad”.
El buque permanecerá en el puerto de Tacoma hasta que arregle todas las deficiencias detectadas durante la inspección.
El incumplimiento de la normativa internacional en los buques no es un hecho asilado. De hecho, la Autoridad de Seguridad Marítima de Austalia ha retenido a un buque granelero por no respetar los derechos laborales de sus trabajadores.
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