El operador de carga marítima Hapag-Lloyd y el puerto chino de Shenzhen han llegado a un acuerdo para reducir las emisiones de óxido de azufre a la atmósfera. Hapag-Lloyd se ha comprometido a utilizar combustible cuyo contenido en azufre sea inferior al 0,5% mientras sus barcos permanezcan en el puerto de Shenzhen.
La participación en este programa es totalmente voluntaria. Responsables de Hapag-Lloyd han destacado que la compañía ha demostrado reiteradamente su compromiso con la protección del medio ambiente a través de la participación en varios programas que promueven el uso de combustibles de bajas emisiones mientras que los buques están en puerto.
Hapag-Lloyd finalizó con éxito su fusión con la compañía de carga marítima CSAV a mediados de diciembre. La entidad resultante es la cuarta naviera más grande del mundo.
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