El Tesla Model 3 es el vehículo eléctrico más vendido en todo el continente europeo, lo que ha llevado a esta firma norteamericana a aumentar su producción para poder sostener la demanda internacional. Esto, incluso abriendo una planta en China para sus primeras unidades fabricadas en Asia.
La noticia por estas horas es que, luego de aprobar las normativas del Ministerio de Industria chino, la la firma californiana ha entregado su primer automóvil producido en aquellas tierras, más concretamente en Shangai, donde 15 de sus empleados podrán llevarse uno a casa.
Ocurre que Donald Trump decidió incluir un impuesto a aquellos vehículos fabricados en los Estados Unidos que luego fueran comercializados en el gigante asiático, su principal rival comercial. Por eso, Tesla decidió realizarlos en China, ahorrando un 2% de los costes finales de cada modelo.
Completado este primer hito de la fábrica en una de las principales localidades del continente asiático, se espera que desde allí se lancen unos 150.000 Model 3 y 100.000 Model Y al año, lo que permitirá que las otras plantas de la compañía respiren y se enfoquen en el resto de mercados.
En una primera etapa, los empleados de Tesla que se lleven las unidades las someterán a estudios para comprobar si su funcionamiento es exactamente el que esperan. A medida que pasen los meses, harán sus devoluciones a la empresa estadounidense para evaluar posibles correcciones.
Al mismo tiempo, los Palo Alto han anunciado que la primera estación de Supercargadores en China ya está abierta al público, lo que demuestra la fuerte apuesta que tienen por este territorio, uno de los que más dinero mueve en todo el planeta.
