Si los camiones eléctricos ya son una realidad palpable para muchas de las empresas de transporte y logística en la actualidad, no quedan dudas de que, en los próximos años, comenzaremos a ser testigos de unidades impulsadas por hidrógeno que también se suman a sus flotas.
De hecho, son varios ya los fabricantes que apuestan por este segmento, como en el caso de Daimler Trucks, a la que pronto seguirán, según las últimas informaciones, tanto Mercedes como Volvo.
En efecto, debemos considerar los avances de ambas compañías al mismo tiempo porque sus primeros modelos compartirán algunas características esenciales, como por ejemplo su propulsor, luego de alcanzado un acuerdo comercial entre el propio Grupo Volvo y la división de camiones de Daimler.
Mediante esa firma, y tras el pago de 600 millones de euros en la adquisición de la mitad de sus acciones, el grupo multinacional de origen sueco se quedará con el 50% de Daimler Truck Fuel Cell GmbH, la marca dedicada a los vehículos de hidrógeno de la alemana.
Con el objetivo de reducir las emisiones del transporte de larga distancia por carretera, éste sería el empujón final para que los camiones tanto de Mercedes como de Volvo estén a la vuelta de la esquina.
De hecho, ya tuvimos una especie de anticipo de lo que veremos con la presentación del Mercedes-Benz GenH2 Truck, un camión eléctrico con pila de combustible que fue enseñado al público durante el pasado septiembre, prometiendo prestaciones como una autonomía de más de 1.000 kilómetros.
