Según las previsiones que maneja ACS, el conjunto de empresas de la construcción, servicios, concesiones y telecomunicaciones podría aumentar los beneficios un 42% para 2016, hasta alcanzar los 1.000 millones de euros de beneficio neto.
Así lo anunció el presidente de la compañía, Florentino Pérez, que pese a considerar que se trata de un “difícil reto”, garantizó que el grupo “trabajará” para que su beneficio crezca “al menos” un 10% anual en los próximos ejercicios.
Durante su intervención ante la junta general de accionistas de ACS, Florentino Pérez confió el grueso de la futura progresión de la empresa al negocio internacional, que actualmente ya aporta el 86% de sus ingresos, al aumento de la rentabilidad, a la “eficiencia financiera” y a un “moderado apalancamiento”.
En cuanto a la proyección internacional, el presidente aseguró que la “importante reestructuración” realizada en la filial alemana Hochtief empezará a dar frutos desde este mismo ejercicio y garantizó que el periodo 2014-2015 estará “lleno de oportunidades de crecimiento” en los países de referencia de la compañía.
Así, el grupo de construcción y servicios prevé seguir creciendo en sus mercados estratégicos, como son Norteamérica y la zona de Asia–Pacífico, y “aprovechar oportunidades” en Latinoamérica, sin perder su “arraigo en Europa“.
ACS continuará además con su estrategia de centrarse en el desarrollo de infraestructuras y de rotación de su cartera, por la que desinvierte en aquellos activos más maduros para lograr fondos con que promover otros nuevos.
En el marco de su apuesta por la disciplina financiera, el grupo aspira a “incrementar” su acceso a los mercados de capitales, “sustituyendo la deuda bancaria por bonos y obligaciones que permitan recortar los costes financieros”.
De hecho, la junta de accionistas dio luz verde a la empresa para poder emitir títulos de deuda por un volumen máximo de 3.000 millones de euros en los próximos años. Además, ACS prevé solicitar que se le asigne un ‘rating’, una calificación que espera obtener a medio plazo, a finales de año o comienzos del próximo.
En paralelo, la compañía se compromete a mantener un “moderado nivel de apalancamiento” y recortar así su deuda, que actualmente suma 4.579 millones de euros, para que baje del actual ratio de 1,4 veces el beneficio bruto de explotación (Ebitda) que ahora representa.
“Persiguiendo con rigor y decisión estos objetivos, podemos alcanzar en 2016 un beneficio neto del orden de los 1.000 millones de euros. Reto difícil, pero al que vamos a dedicar todas nuestras energías y talento para conseguirlo”, aseguró el presidente de la compañía.
Dado su convencimiento en el “potencial de crecimiento rentable” de ACS, Florentino Pérez garantizó que mantendrá una “política de dividendos estable, acorde a la evolución de la compañía y atractiva para el accionista”.
ACS comenzó 2014 adjudicándose contratos de obras de construcción de líneas ferroviarias de Alta Velocidad (AVE) junto a FCC.
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