El fabricante chino de ordenadores y teléfonos móviles Lenovo ha registrado pérdidas por importe de 609 millones de dólares (569 millones de euros) al cierre del primer semestre de su año fiscal en comparación con el beneficio de 476 millones de dólares (445 millones de euros) que obtuvo en el mismo período del año 2014.
Las ventas de la compañía han alcanzado un total de 22.866 millones de dólares (21.370 millones de euros) en los seis primeros meses de su ejercicio, un 10% más respecto a la misma etapa del año anterior.
Por otro lado, la firma ha perdido 714 millones de dólares (667 millones de euros) en el segundo trimestre en comparación con el beneficio de 262 millones de dólares (245 millones de euros) que alcanzó en el mismo período de 2014, mientras que sus ventas se han incrementado un 16%, hasta los 12.150 millones de dólares (11.355 millones de euros).
Los datos negativos de Lenovo no serán los primeros que se registren en el país, según el Banco Mundial, que ha recortado sus previsiones de crecimiento para China, Asia Oriental y Pacífico en 2015 y 2016.
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