La compañía General Motors (GM) pagará una multa de 795 millones de euros a las autoridades federales estadounidenses en relación con el defecto del sistema de ignición que afecta a 2,6 millones de vehículos del fabricante y que ha causado al menos 124 muertes.
Según adelantó el periódico The Detroit News, GM ha aceptado un acuerdo por el que será imputado por dos delitos y será sometido a control por una entidad independiente.
El defecto del sistema de ignición afectó a modelos producidos por las marcas de GM antes de la creación de la nueva General Motors en 2009. El fallo permite la desactivación involuntaria y repentina del motor del vehículo, lo que desconecta los airbags.
El vicepresidente ejecutivo de General Motors, Craig Glidden, ha explicado que “las partes del acuerdo han resuelto alegaciones complicadas sin la carga, el gasto y la incertidumbre del litigio”.
El sistema de ignición no es el único que ha dado problemas a la empresa ya que General Motors retiró vehículos en México por un fallo en la puerta del maletero en julio de este año.
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