Bolivia aceptó enviar gas adicional al que ya estaba previsto enviar a su vecina Argentina para el invierno austral, que ya se avecina.
Es un alivio para Argentina que intenta pasar el frío del hemisferio sur sin que el suministro de gas natural interno se vea afectado.
Pero además, llega en un momento en que Bolivia está centrando su producción para la venta a Brasil, una economía más grande.
La ayuda boliviana llegará en los meses de alta demanda, de mayo a septiembre. En estos momentos, Bolivia envía unos 7,5 millones de metros cúbicos al día a Argentina por gasoducto.
Ahora, en invierno serán enviados al menos 14 millones de metros cúbicos al día, con la posibilidad de aumentar a 18 millones de metros cúbicos, a un precio medio de 12 dólares por millón de unidades térmicas británicas.
A Argentina le preocupaba tener que racionar el gas para los grandes usuarios industriales, como los fabricantes de fertilizantes y las fundiciones de aluminio.
