La naviera Grimaldi Lines ha comprado el 100% de las acciones de su filial Finnlines, consiguiendo así el control completo de la compañía. El grupo italiano ha decidido incrementar su participación en el operador finlandés, completando un proceso de adquisición que comenzó en el año 2005.
La estrategia de Grimaldi está basada en la reestructuración de rotaciones y la venta de activos no estratégicos, incluido el excedente de buques, entre otras actuaciones. El plan le ha permitido a la naviera fortalecer sus resultados operativos y económicos en un contexto difícil para el transporte marítimo.
De hecho, el operador cuenta con la flota más moderna del Mar Báltico, tras haber invertido más de 1.000 millones de euros en buques sostenibles en los últimos años. Además, la compañía ha gastado más de 100 millones de euros en tecnología ‘verde’ desde 2014.
Los resultados suponen para Grimaldi la prueba de que la naviera finlandesa ha tomado de forma proactiva las medidas adecuadas para consolidar su posición en el mercado. Asimismo, Grimaldi ha mejorado el servicio Mediterranean Express Service que une regularmente el Mediterráneo con África occidental.
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