Legálitas recomienda interponer denuncia en caso de sufrir robos en la vivienda durante las vacaciones de verano por si el ladrón fuera detenido en un futuro o si se encontraran los bienes.
Además, en caso de contar con cobertura de robo en el hogar, la denuncia será obligatoria. De todos modos, Legálitas recuerda que la mayoría de las pólizas cubren el robo, pero no el hurto, es decir, cuando la desaparición de los bienes se produce sin fuerza o violencia.
Por otra parte, la salida por vacaciones también puede provocar inundaciones en la vivienda o algún problema con las tuberías que dañen paredes, suelos, techos, muebles o electrodomésticos.
Ante esta situación, hay que ponerse en contacto con la compañía aseguradora de la vivienda para que, si entre las coberturas contratadas se encuentra la inundación, se desplace un perito que analice el origen de los daños y cuantifique los mismos.
Este informe servirá de base a la compañía para reclamar a la aseguradora del causante si tiene seguro y, en caso contrario, al causante directamente. Si, por el contrario, la inundación hubiera sido ocasionada por un despiste propio, habrá que atenerse a lo contratado en la póliza del seguro.
Además de los daños que se hubieran podido ocasionar en la vivienda, es muy importante que el perito tenga en cuenta también el mobiliario que se pudiera haber visto afectado, por ejemplo, alfombras, electrodomésticos o muebles, por si son susceptibles de reparación o de indemnización al no ser posible devolverlos al estado anterior al siniestro.
A pesar de los problemas en la vivienda, la plataforma de reclamaciones ‘online’ Populetic.com aseguró el año pasado que la mayor parte de las quejas de viajeros en verano estaban relacionadas con el transporte aéreo.
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