Con el congestionamiento en los puertos del sur de California, en Estados Unidos, algunas líneas navieras y sus clientes importadores buscan alternativas y no sufrir los inconvenientes y retrasos que ya se viven.
Algunas navieras han trasladado operaciones a puertos más pequeños y cancelaron algunas salidas para evitar los atascos que han inmovilizado docenas de buques y cientos de miles de contenedores repletos de bienes frente a los puertos de Los Ángeles y Long Beach.
Una de ellas es CMA CGM, la cuarta naviera del mundo, que sustituyó un servicio semanal de seis buques desde China a Los Ángeles por un itinerario separado a Oakland, California, y Seattle.
Las tensiones en la cadena de suministro aumentan a medida que la reserva de buques que esperan entrar en los puertos vecinos del sur de California ha crecido más allá del número que quedó anclado durante los conflictos laborales de 2014.