Uno de los más importantes compradores de petróleo venezolano, China National Petroleum Corp (CNPC) rechazó por segundo mes consecutivo cargar envíos debido a que desea evitar sanciones de Estados Unidos.
La agencia informativa Reuter recordó que ya el mes pasado la empresa asiática tampoco recibió los despachos, cuando estaban recientes las acciones de Washington.
El Gobierno de Donald Trump congeló los activos del régimen venezolano en Estados Unidos, advirtiendo a las compañías que no hicieran negocios con la estatal Petróleos de Venezuela S.A (PDVSA).
Otras fuentes, con alto rango de la industria china, habrían dicho a la agencia que “el mes pasado CNPC interpretó el decreto del gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como un potencial preludio para sanciones más profundas que podrían afectar a la compañía por ser un importante cliente de Caracas, Venezuela”.
La decisión se da en momentos en que la petrolera estatal rusa Rosneft se ha convertido en el principal operador de crudo venezolano, enviando petróleo a otros compradores y ayudando a Caracas a contrarrestar la pérdida de operadores que están evitando esos suministros por temor a violar las sanciones de Estados Unidos.
