La naviera danesa Maersk, la mayor del mundo en el transporte de contenedores, ha reducido su participación en la capacidad de la flota de portacontenedores global al 15%. Esta cifra es la más baja desde que se inició el registro de datos en 1996 y representa una caída de cuatro puntos porcentuales desde 2015.
La pérdida de cuota de mercado de Maersk se debe al mayor crecimiento de sus competidores, especialmente los asiáticos, que han realizado fuertes inversiones en la renovación y ampliación de sus flotas.
Según los datos de Alphaliner, las navieras chinas COSCO y Evergreen ocupan el segundo y tercer lugar en el ranking mundial, con una participación del 13,4% y el 7,1%, respectivamente. Les siguen las navieras francesa CMA CGM, con un 6,9%, y suiza MSC, con un 6,8%.
Maersk ha adoptado una estrategia más conservadora en cuanto a la adquisición de nuevos buques, enfocándose en mejorar su rentabilidad y su sostenibilidad. La naviera ha anunciado recientemente la compra de ocho buques portacontenedores de 16.000 TEU (unidad equivalente a un contenedor de 20 pies), que serán los primeros en funcionar con metanol, un combustible más ecológico que el fueloil.
Maersk sigue siendo el líder indiscutible del mercado de portacontenedores, con una flota de 709 buques y una capacidad total de 4,1 millones de TEU. Sin embargo, la naviera enfrenta el desafío de mantener su posición ante el avance de sus rivales y las exigencias del comercio marítimo global.
