Los puertos de Los Ángeles y Long Beach, en la costa oeste de Estados Unidos, informaron de una disminución combinada del 55% en la carga con sobreestadía en los muelles desde que se anunció el cobra de una tasa extra, el 25 de octubre.
Y aunque el sobrecargo no se ha aplicado, la medida ha funcionado. Sin embargo, el 21 de enero las autoridades de ambos puertos volverán a considerarla, tras supervisar los datos durante esta semana.
La aplicación de la tasa ha sido pospuesta por ambos puertos desde el inicio del programa.
En virtud de la política temporal aprobada el 29 de octubre por las Comisiones Portuarias de ambos puertos, se espera cobrar a las líneas navieras por cada contenedor de importación con sobrestadía. Actualmente, no se ha fijado ninguna fecha para iniciar la revisión del tiempo de permanencia de los contenedores en ambos puertos.
Los puertos tienen previsto cobrar a las líneas navieras US$100 por contenedor, aumentando en incrementos de US$100 por contenedor y día hasta que la unidad salga de la terminal.
Se espera que todas las tasas recaudadas por la carga de los contenedores se reinvertirán en programas diseñados para mejorar la eficiencia, la velocidad de la carga y hacer frente a los impactos de la congestión.
