El Puerto Bolívar de Ecuador enfrentó recientemente un desafío significativo debido a la actividad delictiva. Entre el 9 y 10 de septiembre, no pudo embarcar 400 contenedores de banano debido a que los tripulantes de los remolcadores que se encontraban en maniobras con un buque de Maersk fueron extorsionados por bandas delictivas.
Este incidente activó los protocolos de seguridad del buque, lo que llevó a la suspensión temporal de sus actividades. Como resultado, los 400 contenedores tuvieron que ser transportados al puerto de Guayaquil para poder ser exportados.
La Corporación de Gremios Exportadores del Ecuador (Cordex) explicó que este retraso afectó la calidad del producto y su competitividad, generando costos adicionales asociados con movimientos imprevistos en la carga de la fruta.
En lo que va del año, los principales productos de exportación, como el camarón, el banano, el cacao y la pesca, han registrado más de 500 incidentes delictivos. En conjunto, las pérdidas económicas por la inseguridad superan los US$5 millones.
Ante esta amenaza, el sector exportador destina más de US$200 millones en diversos servicios y equipos de seguridad privado. A pesar de estos desafíos, el Puerto Bolívar sigue comprometido con garantizar la seguridad y eficiencia en sus operaciones.
