La cereza es una fruta muy importante para la celebración del Año Nuevo Chino, que será el 5 de febrero de 2019. El producto es tan demandado que la producción asiática no alcanza y Chile es uno de los principales vendedores del rubro.
El año pasado desde Chile fueron enviadas a China unas 20 millones de cajas de cerezas, un símbolo de la prosperidad y la buena suerte. Pero para este año se estima que habrá que exportar más de 30 millones de cajas, una cifra exorbitante desde el punto de vista de Ignacio Lara, gerente comercial de Maersk Chile.
“Estamos en la necesidad de prepararnos para responder a las necesidades tanto de los exportadores como de los consumidores, para entregar este fruto en óptimas condiciones”, aseguró Lara.
China es un consumidor nato de cerezas. El año pasado fue el comprador más grande del mundo en el rubro. De la producción chilena, 70% fue enviada al gigante asiático.
Ante las expectativas, Maersk optimizó las exportaciones de este producto con servicios semanales, viajes que en su mayoría tienen como destino de descarga a Hong Kong, históricamente principal centro de consumo para del fruto.
Las bajas de la producción por las precipitaciones con granizo en el sur de Chile serán leves, pero afectarán directamente los arándanos, cerezas, carozos, kiwis y uva de mesa.
