El operador logístico Maersk quiere convertirse en un integrador logístico a toda costa, incluso en los peores momentos de la economía, al establecer un nuevo servicio ferroviario de transporte hacia Asia. Se trata de una modalidad que combina las fortalezas de distintos medios de transporte para optimizar las rutas de larga distancia.
En concreto, la prestación se encargará de trasladar mercancías para el abastecimiento desde San Petesburgo hasta Vostochny (ambas en Rusia), lo cual consigue disminuir el tiempo de tránsito desde el Báltico hasta el Extremo Oriente. Justamente, este primer convoy traslada productos químicos y madera procedentes de diferentes países escandinavos.
En este punto, Maersk está planeando embarcar los contenedores transportados por vía férrea a otros dos destinos finales, es decir, a Corea y Japón. De esta forma, la compañía cierra el ciclo de servicios intermodales de esta línea. Entre los beneficios que aporta esta conexión, cabe destacar que los tiempos de tránsito son menores, ya que el trayecto dura entre 23 y 32 días hasta llegar a Corea y Japón, mientras que si el mismo servicio se cubre por vía marítima tarda entre 52 y 57 días hasta llegar a ambos destinos.
Por otra parte, Maersk informó a sus clientes en Argentina el término de su relación contractual con el Terminal Río de la Plata (TRP) de Buenos Aires, a través de un comunicado en el que explicó las razones: cambio en las condiciones del mercado en Argentina. De este modo, la naviera dejará de prestar el servicio desde ese terminal a partir del 15 de mayo, fecha cuando comenzará el servicio “SAMBA”, operado por APMT Terminal 4.
