El operador marítimo Grimaldi ha anunciado que usará el sistema de suministro eléctrico que se implantará en el muelle San Beltrán, ubicado en el Puerto de Barcelona (España). Esta mejora se llevará a cabo gracias a que la naviera italiana y la Autoridad Portuaria han cerrado un acuerdo para definir una hoja de ruta, así como realizar la prueba piloto en la terminal.
Asimismo, se quiere analizar la compatibilidad a la hora de conectar el muelle y los buques, a la vez que se definirá un procedimiento operativo conjunto en el que se detallen todas las acciones de conexión/desconexión junto con los operadores implicados.
Por su parte, el enclave catalán ha comenzado su proyecto Nexigen para electrificar los muelles del recinto con una inversión de 110 millones de euros. El principal objetivo de esta iniciativa es reducir la carbonización de la actividad portuaria y optimizar la calidad del aire.
Para ello, la Autoridad Portuaria se ha propuesto electrificar para 2030 todos los puntos de atraque de los cruceros, el muelle Prat, y las terminales de ferrys de la dársena de Sant Bertran, así como el muelle de Costa. A través de este cambio, la dársena catalana eliminará por completo 66.000 toneladas de CO2 y 1.234 toneladas de NOx de las emisiones de la actividad portuaria y disminuirá el 38% del NOx y del CO2 emitidos por los barcos durante su estancia en el muelle.
Otro dato interesante es que, Grimaldi ha diseñado un sistema que filtra el agua de lavado de los scrubbers instalados en las embarcaciones. Se trata de una iniciativa que tiene el objetivo de reducir los microplásticos que se encuentran en el mar por todo el mundo. El proyecto se integrará en los buques de Trasmed que operan entre la península y Baleares.
