Las mejoras en los puestos fronterizos de Costa Rica van con retraso, al no haberse votado en la fecha prevista la posibilidad de pedir un préstamo al Banco Interamericano de Desarrollo. Los empresarios han mostrado su descontento ante la situación.
Costa Rica tiene pendiente la modernización de varios de sus puestos fronterizos para agilizar el tráfico en los mismos. En algunos lugares la velocidad promedio de circulación para cruzar la frontera es de 17 kilómetros por hora, lo que causa importantes pérdidas a las empresas que se dedican a la importación y exportación.
La votación para decidir sobre la petición de un préstamo al Banco Interamericano de Desarrollo para llevar a cabo la modernización de las aduanas debería haberse realizado el pasado 6 de abril, pero se ha retrasado para consultar con los pueblos indígenas que viven cerca de los pasos fronterizos.
La Unión de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (UCCAEP) ha reiterado su petición de que el tema sea tratado por la Asamblea Legislativa lo antes posible, destacando además que la cuestión ya había sido sometida a consulta con la Comisión Nacional de Asuntos Indígenas.
Los pasos fronterizos de Las Tablillas, Paso Canoas, Peñas Blancas y Sixaola son los que se están viendo afectados por los retrasos.
El país está mejorando sus infraestructuras. De hecho, Costa Rica ha avalado el fideicomiso para la construcción de la vía a San Ramón.
