El pasado 1 de julio se produjo en Monclova (Coahuila) una manifestación que reunió a más de 20.000 personas para exigir al Gobierno de México que adopte medidas que protejan al sector del acero frente a las importaciones chinas de este material.
La manifestación ha sido catalogada como un hecho histórico al reunir a trabajadores, empresarios y sindicatos del sector, pero también a miembros de las cámaras industriales, funcionarios, políticos y todo tipo de ciudadanos para defender el empleo en el sector del acero.
El sector del acero acusa a las empresas chinas de ejercer una competencia desleal al hacer que las empresas mexicanas no puedan competir con los bajos precios del acero chino e instan al gobierno mexicano a adoptar medidas que establezcan un equilibrio competencial más justo para todos.
La Secretaría de Economía de México manifestó a finales de junio que, tras terminar los estudios pertinentes, había determinado que la actuación china suponía un ejercicio de competencia desleal, por lo que se iban a imponer nuevos aranceles a las importaciones de acero chinas a fin de equilibrar la situación.
Por el momento no se ha establecido ningún tipo de arancel y los sindicatos del sector del acero manifiestan que se les acaba el tiempo y que, si no se toman medidas, el sector deberá recortar unos 8.500 empleos a finales de julio.
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