Apenas 10 camiones de transporte de carga operan en las rutas internacionales de Bolivia, una disminución preocupante de la actividad comercial provocada por la covid-19.
La Asociación del Transporte Internacional de Bolivia (Asociatrin) encendió las alertas porque a dos meses del inicio de la cuarentena las restricciones han dejado menor flujo de volumen en el transporte en sectores clave como los derivados de soja, minería y construcción.
El presidente de Asociatrin, Marcelo Cruz, comentó que en el sector oleaginoso el volumen de carga se contrajo en un 50%, a pesar de que la cosecha del grano ya está avanzada. “Estamos en plena época de exportación y trabajamos por debajo de lo que debería ser”, explicó.
En el sector minero los números son parecidos, con un bajón de 40%. Pero en la construcción hay mayores dificultades, pues las importaciones materiales se redujeron a cero y se paralizó el transporte de cemento en el mercado interno.