El Puerto de Cádiz (España) ha gestionado la descarga de dos calderas productoras de vapor en la dársena Cabezuela-Puerto Real. La carga total está compuesta de cuatro calderas, de las cuales dos de ellas ya se han montado en el muelle para una planta petroquímica de Hyundai en Vietnam.
En concreto, el buque Donald ha empleado su propia grúa para elevar ambos equipos en el atracadero Sur de Cabezuela. La ingeniera Wood se ha encargado de diseñar las calderas, que se empezaron a construir en el mes de enero, las cuales destacan por contar con doce metros de largo, ocho de ancho y nueve de alto, además de un peso de 203 toneladas en vacío y hasta 285 toneladas si están llenas de agua.
Asimismo, estos equipos llegan a una presión de trabajo de 56,4 Kg/cm2, presión de prueba de 84,6 kg/cm2, y producción de vapor de 181,5 T/h. Por su parte, la compañía Fibe ha fabricado diferentes aceros para su construcción, destacando los 46 milímetros (mm) de espesor del calderín de agua y los 86 mm del calderín de vapor.
Debido a la competitividad en la gestión de cargas especiales y la ubicación estratégica de la Autoridad Portuaria gaditana, la firma Fibe escogió montar las calderas en Cádiz, con el fin de transportarlas por mar hacia su destino final.
La actual crisis sanitaria ha destacado el valor de la digitalización en el sector marítimo a la hora de realizar las gestiones cotidianas. En este sentido, el Puerto de Cádiz ha otorgado a la compañía Emetel Sistemas el desarrollo de su Plan Director de Tecnología, el cual está enfocado hacia la digitalización de las instalaciones portuarias. En un principio, el proyecto se había visto perjudicado por el paro de los procedimientos de contratación que se impusieron en el estado de alarma.