El Puerto de Ferrol San Cibrao (España) sigue adelante con la ampliación del Puerto de Inspección Fronteriza (PIF), tras recibir un total nueve candidaturas para realizar las obras de la segunda fase. Los planes presentados tienen valoraciones finales que varían entre los 80,6 y los 92,6 puntos.
La obra de ampliación se puede llevar a cabo gracias a que la Autoridad Portuaria ya había obtenido el visto bueno para la ejecución del PIF en octubre del año pasado. De modo que, las obras de la segunda fase se solapan con las que ya se han ejecutado con anterioridad, para lo cual se incrementarán los servicios y se captarán más tráficos.
No cabe duda de que, las nuevas instalaciones impulsarán el crecimiento de la terminal de contenedores del enclave gallego y fortalecerán la competitividad de las compañías que trabajan en la zona y se localizan en el lado oeste del edificio de inspección ya ejecutado, con una superficie de 313,76 metros cuadrados y con dos salas de inspección.
El principal objetivo de la Autoridad Portuaria es crear nuevas oportunidades para la importación a la industria de su área de influencia y para la exportación a través del puerto exterior. Los trabajos cuentan con un plazo de ejecución de cinco meses, un presupuesto base de licitación de 866.904,37 euros y un valor estimado del contrato de 716.449,89 euros.
Mientras se concretan los procedimientos para la segunda fase, la Autoridad Portuaria de Ferrol San Cibrao ha recibido un total de seis grandes remolcadores oceánicos, la cual ha dado valor a los activos de uso no intensivo actualmente y ha abierto una nueva línea de negocio. La operación se ha producido en base a un acuerdo entre el enclave coruñés y el operador Topaz Energy & Marine.
