México está ampliando la capacidad de sus puertos a fin de mejorar la movilidad interna de mercancías y aumentar su protagonismo en el comercio internacional. Los puertos mexicanos moverán más de 400 millones de toneladas de carga en 2016.
El desarrollo de los puertos mexicanos había sido una asignatura pendiente en el desarrollo logístico y económico del país hasta hace unos años. El gobierno ha puesto en marcha diferentes planes de desarrollo y creación de nuevas terminales que ha permitido agilizar el tráfico de mercancías.
El objetivo es llegar a 2018 con una capacidad portuaria que permita mover más de 500 millones de toneladas al año, frente a las 140 millones de toneladas de mercancía que los puertos mexicanos movieron en 2012.
Los puertos de Manzanillo y Lázaro Cárdenas ya han terminado su remodelación, mientras que el puerto de Tuxpan está a punto de ser terminado y prosiguen las obras en el puerto de Veracruz. Las nuevas terminales, además de ser más grandes, han sido equipadas con la infraestructura más moderna a fin de poder ampliar su capacidad operativa.
La mejora de los puertos era necesaria para que México sea más competitivo. De hecho, el Coordinador General de Puertos y Marina Mercante de México apuesta por dar mayor acceso a la inversión privada en el sector.
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