Cala Figuera tiene aprobada la licitación para el concurso de ideas, que se tendrá en cuenta para realizar las obras de reordenación y urbanización del lugar. En esta ocasión no se trata de un boceto realizado por un particular, ni mucho menos. Una de las bases del concurso es que el proyecto sea realizado y entregado por profesionales.
Estos equipos tendrán que estar formados por al menos un arquitecto y un ingeniero. Habrá tres premios. El primer finalista recibirá 30.000 euros, el segundo 20.000 y el tercero 15.000 euros. Las condiciones han sido impuestas por Puertos y el Colegio de Arquitectos de Balears.
El objetivo del concurso es encontrar un proyecto realista que impulse la actividad económica. Se intentará lograr con la planes que incluyan un conjunto de edificios (orientados a los servicios náuticos), aparcamientos, un muelle práctico y atractivo, y viales que conecten directamente con la población.
Se valorarán las ideas prácticas que den soluciones a la falta de espacio, como por ejemplo una rampas de acceso directo al agua. También la creación de un punto de reunión para navegantes.
En cuanto a la capacidad del amarre en el agua, se quiere dar cabida a al menos setenta embarcaciones de diferentes dimensiones, quedando en el interior las más pequeñas y en las zonas más lejanas al muelle las de mayor tamaño.