El Puerto de Alicante (España) ha anunciado que reducirá las tasas de ocupación y actividad a los concesionarios que lo han pedido, una medida que forma parte del Real Decreto de medidas de reactivación económica para hacer frente al impacto del Covid-19, dentro del sector de transporte.
Esta decisión refleja con claridad la actual situación de la mayoría de los puertos del país, los cuales han tenido que tomar medidas que les permitan mantener su nivel operativo y a la vez ser un apoyo a las comunidades portuarias. En este sentido, el enclave alicantino ha expresado que los cambios han supuesto un importante esfuerzo por su parte, al tener que equilibrar el amparo a las empresas y a la economía alicantina.
Gracias a la bajada en las tasas, las compañías que forman parte de la comunidad portuaria alicantina podrán ahorrar un total de 1,4 millones de euros, según los cálculos de la Autoridad Portuaria. Esta no es la única medida que ha tomado recientemente el embarcadero alicantino, sino que también se han admitido aplazamientos y fraccionamientos de pago, sin tener que exigir garantías y sin devengo de intereses de demora, lo cual forma un valor de 2,3 millones de euros.
La pandemia ha modificado por completo la forma de gestionar los recursos de los enclaves españoles, aún así se sigue avanzando en proyectos de sostenibilidad y mejora de las instalaciones. Un ejemplo de ello es que, la nueva terminal de pasajeros del Puerto de Valencia velará por la sostenibilidad y se convertirá en un “referente para la actividad crucerista”, según indica la directora Comercial y de Desarrollo de Negocio de la Autoridad Portuaria, Mar Chao, quien ha participado en la presentación del Informe de Prácticas y Tecnologías Ambientales 2020 de CLIA.
