El Puerto de Vigo (España) ha apostado por el desarrollo de buques eléctricos e híbridos con su nuevo proyecto ‘Green Bay Vigo’. Se trata de una iniciativa, cuyo presupuesto asciende a 40 millones de euros, en la que ha estado trabajando la firma durante el último año. La idea es conseguir las cero emisiones para 2030.
La Autoridad Portuaria apuesta por un cambio hacia combustibles más limpios y el diseño de buques sostenibles, y en este sentido, cuenta con el apoyo de Xunta, el Clúster del Naval de Galicia, el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia, el Centro de Innovación y Tecnología Aimen y el astillero de aluminio Aister.
Entre los objetivos a conseguir, se quiere electrificar la movilidad marítima de la Ría. Este punto supone el diseño de cuatro tipos de buques, como son los ferries de transporte de pasajeros, pesqueros de bajura, bateeiros y embarcaciones portuarias, utilizando una propulsión diferente en cada caso.
Es más, el enclave gallego añadirá diferentes instalaciones para la carga de los mismos. Otro proyecto que el embarcadero tiene en mente está relacionado con el desarrollo de una aplicación móvil para hacer un seguimiento de la situación de los ferries en la Ría.
No cabe duda que, todas las iniciativas aportan beneficios, como la disminución del riesgo de vertidos y emisiones a la atmósfera, además de posicionar al enclave como un nuevo mercado en auge, sobre todo si se tiene en cuenta que se podría intercambiar el conocimiento del sector de la automoción con el de la construcción naval.
Respecto a los enclaves cercanos, el Puerto de Marín y Ría de Pontevedra ha otorgado a la compañía Ronautica Quality Marinas las obras de modificación y ordenación de la dársena de embarcaciones menores, ubicada en la zona de Placeres.
