Brittany Ferries está a punto de celebrar sus cincuenta años de existencia desde que en enero de 1973 emprendió su travesía inaugural entre el enclave francés de Roscoff y el puerto británico de Plymouth.
Asimismo, la naviera lleva 44 años operando en el Puerto de Santander, enclave en el que ha aportado su granito de arena al desarrollo económico y comercial de Cantabria. De hecho, desde que la compañía ha llegado a la capital cántabra, los barcos de Brittany Ferries han realizado más de 4.000 escalas en Santander y han transportado hasta esta ciudad a más de cinco millones de pasajeros.
Cristhope Mathieu, consejero delegado de Brittany Ferries, estima que “las rutas entre España y Reino Unido están en su mejor momento, los barcos están llenos y los británicos han vuelto”. Por ello, la naviera va a contratar personal con formación en francés, para cubrir las necesidades de recursos humanos de sus nuevos buques, entre ellos el ‘Santoña’, que comenzará a operar el próximo año.
Se trata del primer buque de la compañía que navegará propulsado por GNL en el Puerto de Santander. El barco, de 215 metros de eslora y 30 de manga, tendrá capacidad para 275 vehículos y 1.015 pasajeros, alojados en 341 camarotes.
A parte de esta celebración, Brittany Ferries ha comenzado esta semana los trabajos de construcción de su nuevo y primer buque híbrido. La embarcación navegará bajo el nombre ‘Saint Malo’ y sustituirá al navío ‘Bretagne’. Su principal cometido será unir el Puerto de Saint Malo (Francia) con Portsmouth (Reino Unido), una vez que entre en servicio en 2025.