El Puerto de Tarragona (España) está determinando los últimos aspectos del modelo de gestión de su Zona de Actividades Logísticas (ZAL), el cual se ubica en Vila-Seca. Se trata de una iniciativa que cuenta con una zona de 92 hectáreas, cuya inversión asciende a los 70 millones de euros, que se licitará en tres frases.
El proyecto manejará cifras superiores, no obstante se estima que el movimiento de mercancías de la zona empezará en el año 2022, al terminarse los trabajos de urbanización y la construcción de las naves. Las concesiones se otorgarán por un plazo de hasta 30 años.
El enclave tarraconense tiene en mente levantar instalaciones de diferentes dimensiones, pudiendo alcanzar los 166.000 metros cuadrados la zona de mayor tamaño. Es más, se prevé que la ZAL, cuyo proyecto forma parte del plan de empresa de la Autoridad Portuaria hasta 2024, aportará un valor añadido bruto anual de 150 millones de euros cuando esté en su apogeo.
Cabe destacar que, el embarcadero catalán también prevé diferentes inversiones en otras iniciativas portuarias, como un total de 30 millones de euros que se destinarán a la ampliación del Muelle de Baleares, unos 20 millones de euros que se invertirán en el contradique de Els Prats o los 18 millones de euros consignados para la terminal intermodal de Guadalajara.
Por otro lado, el Puerto de Tarragona ha iniciado la primera fase del Muelle Baleares al publicar la convocatoria y recibir un total de seis propuestas para ejecutar el proyecto constructivo. De modo que, la Autoridad Portuaria ha recibido ofertas de FCC, Comsa, Rover Maritime, la unión temporal de empresas (UTE) Acciona Construcción y Copcisa, la UTE de Dragados y Drace Infraestructuras, la propuesta de la UTE formada por OHL, Copisa y Sato, así como Sacyr Infraestructuras.