El Gobierno peruano pretende acabar con la congestión vehicular, la inseguridad y otros factores que se generan alrededor del puerto del Callao con la construcción de un antepuerto.
Estos problemas crean serios problemas a la ciudad y los usuarios del recinto. Mincetur y el Banco Mundial hablan de un costo adicional de 500 dólares por contenedor debido a estos inconvenientes.
Para el proyecto, se planea utilizar instalaciones de la Base Naval para el parqueo de camiones de carga, en unas 2º hectáreas, entre las avenidas Néstor Gambetta y Contralmirante de Mora.
Desde el Gobierno se espera que se reduzca la congestión que causan los 3.800 camiones que entran y salen cada día de los terminales portuarios del Callao, con una espera de hasta 14 horas.
Pero, para la Asociación Peruana de Operadores Portuarios (Aspor) la medida no es apropiada puesto que los camiones ingresen a esta zona demandaría una tarifa y un costo adicional al exportador peruano.
“Esto encarecería el comercio exterior. El antepuerto busca reemplazar la no inversión en infraestructura para el ingreso al puerto. No se ha creado, por ejemplo, un viaducto para el acceso de los camiones”, dijo el presidente de la asociación, José Vicente Silva.
