La Asociación Internacional de Líneas de Crucero (CLIA) ha establecido nuevas medidas de prevención en buques de crucero para reducir las probabilidades de propagación del coronavirus en los cruceros. Las nuevas normas aprobadas establecen que no se permitirá el embarque a todas las personas que hayan viajado, visitado o pasado por los aeropuertos de Corea del Sur, Irán, China o las localidades de Italia en cuarentena, durante los 14 días anteriores.
A parte de comprobar si sus viajeros han pasado por alguno de los focos europeos y asiáticos, CLIA ha decretado que se realizarán controles específicos a todas las personas que hayan viajado, visitado o pasado por los aeropuertos de cualquier destino que aparezca en la lista publicada por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Entre otras acciones, la organización se encargará de que se haga una revisión de síntomas como fiebre, tos y dificultad respiratoria en los 14 días previos y la medición de la temperatura. Es más, los operadores marítimos estarán obligados a realizar un control de la temperatura a todas las personas que embarquen, de modo que cualquier viajero que tenga más de 38ºC de fiebre se le hará una segunda revisión y una evaluación médica.
Cabe destacar que, no podrá embarcar toda aquella persona que en los 14 días anteriores haya tenido contacto o cuidado de alguien con el virus Covid-19, que manifestara esos síntomas o que estén en vigilancia por una posible exposición a la enfermedad.
Aunque se tomen medidas, los efectos negativos en el transporte marítimo se siguen notando. En este sentido, la consultora de investigación marítima Drewry ha realizado un estudio para determinar los efectos del coronavirus, cuyo impacto a corto plazo ya ha afectado la industria del transporte marítimo y a las navieras, siendo China el principal foco del virus.
