Fuentes del sector han informado que la huelga de camioneros que paralizó Brasil por once días y provocó una grave crisis de desabastecimiento de combustibles, alimentos e insumos, dejó pérdidas por 3.150 millones de reales (850 millones de dólares) a productores de pollos y cerdos.
En concreto, las pérdidas fueron calculadas por la Asociación Brasileña de Proteína Animal (ABPA) e incluyen desde las cerca de 70 millones de aves que murieron por no recibir ración hasta las casi 135.000 toneladas de carnes que dejaron de ser exportadas en el período.
Cabe recordar que la huelga de los camioneros ocurrida entre el 21 y el 31 de mayo para exigir la reducción del precio de los combustibles paralizó totalmente el transporte por carreteras en Brasil, bloqueó las vías e impidió la circulación de animales vivos, ración para los animales en las granjas, cortes de carnes y carnes procesadas.
Según la ABPA, las 167 plantas de procesamiento de carnes de pollo y de cerdo que tuvieron que paralizar su producción por la huelga ya reiniciaron operaciones pero necesitarán de hasta 60 días para normalizarlo todo.
La patronal explicó que “conforme los últimos números consolidados de los asociados, la paralización generó impactos totales por 3.150 millones de reales al sector productor y exportador de aves, porcinos, huevos y material genético de origen animal”.
El sector tiene una gran importancia en Brasil debido a que el país es el mayor exportador mundial de carne de pollo y uno de los mayores de carne de cerdo.
Según la Asociación, pese a esas pérdidas, el reinicio del transporte de raciones evitó la muerte de hasta 1.000 millones de animales que corrían riesgo por la falta de alimentos. Las pérdidas del sector pueden ser mayores debido a que la paralización aún generará otros costos extras, según el organismo.