De enero a noviembre de 2018, México registró 2.362 arribos y seis millones 975.000 cruceristas, lo que significó un aumento de transboradores en sus puertos de 4%, en comparación con el año anterior.
En el mismo periodo, también creció 7,2 % el número de turistas por buque.
El Banco de México (Banxico) reveló que la industria de cruceros aportó unos 480 millones de dólares al país norteamericano.
La Coordinación General de Puertos y Marina Mercante tiene cifras que ubican al puerto de San Miguel, en la isla de Cozumel, Quintana Roo, con la mayor actividad crucerística de México.
Y superadas las expectativas de 2018, las autoridades esperan que este año sea más competitivo.
Además, el valor agregado de los servicios, atracciones y amenidades sigue creciendo a bordo. Por eso, la Asociación Mexicana de Agentes Navieros (AMANAC) y la Asociación de Cruceros Florida Caribe (FCCA) acordaron promover la cooperación marítima.
Las líneas de cruceros y navieras invierten cada año en México unos 135,6 millones de dólares sólo en promoción turística, un equivalente a 25 dólares por pasajero.