La Autoridad Portuaria de Cartagena (España) comenzará próximamente la construcción de su nuevo puesto de control fronterizo, con el fin de centralizar en un mismo edificio todas sus actividades de control de mercancías, así como el área administrativa.
Concretamente, el edificio contará con una superficie de 3.209,46 m² distribuidos en dos alturas y se ubicará en el muelle de Santa Lucía con una inversión de 6,1 millones de euros. El enclave cartaginense estima que a través de este inmueble, más moderno y eficiente, se ahorre espacio y mejore la funcionalidad de las instalaciones portuarias, a parte de cumplir con la petición europea de un mayor control fronterizo.
Teniendo en cuenta que la dársena destaca por ser una de las líderes en exportaciones de ganado vivo y el primer puerto importador de España, por lo que es imprescindible el contar con infraestructuras que agilicen el movimiento de mercancías y concentren los servicios de control e inspección, como Sanidad Animal, Sanidad Vegetal, Sanidad Exterior, Soivre (Servicio Oficial de Inspección, Vigilancia y Regulación del Comercio Exterior) y Aduanas.
Según las autoridades, la remodelación de este puesto de control «y la eficiencia de sus trabajadores» impulsarán la seguridad alimentaria, ganadera y aduanera, lo que beneficiará a las empresas agroalimentarias de la Región.
La unión temporal de empresas formada por ASCH Infraestructuras y Servicios y SBA Infraestructuras se encargará de las obas, cuyo plazo de ejecución es de un año y medio. Mientras tanto, el actual puesto de control fronterizo de Santa Lucía seguirá funcionando sin interrupciones.
Sin duda, la mejora de las instalaciones llega en un momento ideal para el recinto. Sobre todo si se tiene en cuenta que, el Puerto de Cartagena ha batido un nuevo récord en el tráfico de mercancías durante el primer trimestre, transportando un total de 9,5 millones de toneladas, lo cual supone un aumento del 8,84% en comparación con la misma etapa del año pasado.
