El Gobierno de Argentina presentó el Plan de Modernización del puerto de Buenos Aires para los próximos 50 años, que contempla renovar el puerto con un diseño flexible, para adaptarlo a las necesidades de las próximas décadas, de una manera más competitiva, cuidando estándares ambientales y de calidad.
La presentación estuvo a cargo del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, junto al interventor de la Administración General de Puertos, Gonzalo Mórtola.
Sin embargo, el punto de partida de este plan, no es el plan en sí, sino la reciente unificación del fin de los contratos de las concesiones de las terminales portuarias actuales en mayo de 2020, que permitió desarrollar y ejecutar el proyecto.
Además, el plan tiene previsto integrar otras iniciativas como el Paseo del Bajo y el Distrito Joven.
La inversión para la modernización del puerto de Buenos Aires será de 1.910 millones de dólares a 50 años. El contrato de concesión contempla que durante los primeros 10 años, la empresa privada invierta 760 millones de dólares en obras, mientras que el Estado deberá desembolsar 300 millones de dólares.
Todo con el objetivo de aumentar la movilización de carga. El puerto Buenos Aires pasará de tener una capacidad de 1,4 millones de TEUs en 2020 a 2,7 millones de TEUs en 2030.
Para ello, en la siguiente década el desarrollo de un terminal exterior es lo más importante. Este tipo de instalaciones también las tienen los principales puertos del mundo. De hecho, ya comenzaron las obras de relleno para poder construirlo: se avanzó en 10 hectáreas sobre un total de 45 que estarán listas para 2030.
El puerto de Buenos Aires recibió el primer bitren con contenedores, una operación que se realizó, además, a modo de prueba para evaluar la eficiencia de la logística y energética de este tipo de transporte de carga.
