Los servicios portuarios facturaron más en España durante 2016, continuando así con la senda alcista comenzada en 2014. Los datos apuntan a que el año se cerró con una facturación que superó los 3.500 millones de euros.
Los puertos españoles batieron el año pasado su propio récord, al mover 505 millones de toneladas. La actividad de manipulación de cargas representa hasta un 51,5% del total de los ingresos obtenidos por los puertos españoles durante 2016.
Otro de los fenómenos experimentados durante el pasado año es que los grandes grupos muy diversificados según tipo de actividad siguieron reforzando su liderazgo, existiendo cada vez menos sociedades de pequeño y mediano tamaño.
La previsión para este año, según el informe del Observatorio Sectorial DBK de Informa, es que se siga manteniendo la corriente alcista de los últimos años. Se espera que el volumen de negocio para el bienio 2017-2018 pueda crecer entre un 2% y un 3%.
La importancia de los puertos españoles sigue creciendo. De hecho, el tráfico de contenedores en el puerto de Barcelona aumentó un 14% en noviembre de 2016.
