Los reclamos se multiplican en la terminal de graneles sólidos de Puerto Cortés, en Honduras, por los retrasos en las operaciones, que ya suman a 10 buques a la gira.
La terminal de graneles, operada bajo concesión Logra-TEH, ha recibido quejas de los importadores porque no logra atender con celeridad los buques que transportan carga.
En los últimos días, las cámaras de comercio de Tegucigalpa y San Pedro Sula y el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) informaron que los importadores registran pérdidas millonarias por pagos innecesarios derivados de la espera de los buques en bahía antes de atracar, resaltó la prensa local.
Se trata de pagos de hasta US$40.000 por cada día que un barco opera en bahía. Calculan que, entre enero y septiembre, han gastado alrededor de US$1,5 millones, más de US$1,4 millones por más de 120 días de atraso.
Hasta diez graneleros han estado a la espera de atracar debido a que la terminal no tiene la infraestructura para atender varios al mismo tiempo.
Registros de Marine Tratfic indican que algunos buques han esperado entre 10 y 20 días en bahía para luego someterse al proceso de descarga que demora entre 2 y 8 días, según las toneladas métricas transportadas.